El duelo se define como la reacción emocional ante la pérdida significativa de algo o alguien importante en tu vida. Es el proceso que experimenta una persona para anteponerse y adaptarse a dicha pérdida. Existen muchos tipos de duelo, entre ellos encontramos el duelo sin derechos o desautorizado. Este tipo de duelo ocurre cuando, desde la sociedad no reconocemos la pérdida de un tercero o no dejamos al doliente que la exprese. Parece mentira, ¿verdad? ¿En qué situaciones crees que podría darse este tipo de duelo?

Una de las experiencias en las que se da es en el duelo perinatal. La pérdida perinatal se define como la pérdida del bebé por parte de una persona embarazada desde que se conoce el embarazo hasta el primer mes de vida del bebé. Una de las causas más comunes de pérdida perinatal es el aborto espontáneo. El aborto espontáneo se define como la pérdida prematura del bebé durante las primeras 23 semanas del embarazo. Dentro del aborto espontáneo está: (1) el aborto espontáneo precoz, o aquel que ocurre desde el momento de la concepción hasta la semana número trece de embarazo y (2) el aborto espontáneo tardío, o aquel que sucede a partir de la decimocuarta semana hasta la número veintitrés.

Según las estadísticas, se estima que el riesgo de sufrir un aborto espontáneo en personas embarazadas es del 25%. Incluso, se piensa que este porcentaje podría ser mayor, ya que muchas pérdidas se producen incluso antes de que la persona sea consciente de su estado. Un 25%, eso quiere decir que 1 de cada 4 embarazadas perderá a su bebé de manera espontánea. Esto es, si tienes un grupo de 10 personas y estas se quedasen embarazadas, lo más probable es que al menos 2 pierdan a su bebé. Impactante cuanto menos, ¿no?

El aborto espontáneo y el duelo perinatal no estás sola 2

La temida frase del “yo también”

La pérdida por aborto espontáneo es un tema tabú, muchas personas lo han sufrido, pero no han comunicado su pérdida. No es hasta que alguien saca el tema que muchas otras personas se animan a contarlo. Pero ¿por qué es tabú algo que puede ser tan doloroso? Existen varias razones por las que ocurre esto:

  1. El duelo por aborto espontáneo no se concibe dentro de las normas socialmente aceptadas por lo que el círculo de la persona que lo ha sufrido espera un sufrimiento menor.
  2. No existen rituales funerarios asociados lo que genera la sensación de que esta pérdida no debe ser llorada
  3. La ley del primer trimestre: las personas embarazadas suelen esperar al tercer mes de gestación para comunicar su situación de embarazo. Por ello, cuando ocurren los abortos espontáneos, que suelen dar en este espacio temporal, el entorno no es conocer de la situación lo que hace que se sientan más solas, aisladas y sin apoyo.
  4. Desensibilización desde el ámbito médico al no ser una situación que ponga en peligro la vida de la persona ni tenga solución
  5. El desconocimiento de la naturaleza de la pérdida, como explica la Teoría de la Ambigüedad, es uno de los factores más influyentes en el proceso de duelo
  6. La insatisfacción con el tratamiento y la falta de preparación por parte de los profesionales sanitarios para abordar el tema.

Las consecuencias del aborto espontáneo

No es difícil ponerse en la piel de una persona que ha tenido que vivir esta experiencia. La pérdida de un bebé esperado se puede considerar como un evento traumático, llegando a ser una de las experiencias vitales más dolorosas para los padres. Por ello, las consecuencias psicológicas derivadas son muchas y diversas:

  • Sintomatología ansiosa
  • Sintomatología depresiva
  • Estrés postraumático
  • Emociones intensas de dolor, culpa, rabia y vergüenza
  • Aislamiento
  • Estigmatización
  • Sensación de “brazos vacíos”
  • Procesos de duelos naturales
  • Procesos de duelo complicado
  • Entre otras muchas
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El duelo esperable

El duelo es un proceso necesario por el que transitar para integrar nuestras pérdidas. De acuerdo con los teóricos como Worden, ante una pérdida son varias las tareas que tienes que llevar a cabo:

  • Aceptar la realidad
  • Trabajar las emociones y experimentar el dolor
  • Adaptarse al entorno sin el ser querido
  • Recolocar y recordar al ser querido

Las emociones que transitamos a lo largo del duelo no son cómodas, eso no quiere decir que sean negativas o innecesarias. Al revés, por mucho que queramos “quitárnoslas de encima” éstas nos ayudarán a sanar. Por lo tanto, el hecho de experimentarlas no implica que sea un problema. Sin embargo, hay en algunos casos en los que la experiencia se puede complicar y es recomendable acudir a un profesional.

¿Cómo puedo identificar si estoy atravesando un duelo complicado?

Según el CIE-11 son los siguientes criterios los que pueden indicar que estás experimentando un duelo prolongado:

  • Estrés por separación: anhelo de la persona perdida y/o sentimientos intensos de dolor emocional, pena o angustia presente de manera diaria e intensa.
  • Confusión sobre el propio papel en la vida o disminución del sentido de sí mismo
  • Dificultad para aceptar la pérdida
  • Evitación de recordatorios de la realidad de la pérdida
  • Incapacidad para confiar en los demás desde la pérdida
  • Amargura o enfado relacionados con la pérdida
  • Dificultad para seguir adelante con la vida (por ejemplo, hacer nuevos amigos y perseguir intereses)
  • Entumecimiento emocional desde la pérdida
  • Sensación de que la vida es insatisfactoria, vacía o sin sentido desde la pérdida
  • Sentirse aturdido, atontado o conmocionado por la pérdida

Cuando estos síntomas aparecen y (1) han pasado al menos seis meses desde la pérdida y (2) los síntomas mencionados están alterando de manera clínica y significativa la vida diaria de la persona afectada, tanto a nivel social, laboral u otras áreas importantes en el día a día, estamos ante la situación en la que sería recomendable pedir ayuda profesional.

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La terapia puede ayudar

Tanto si se experimenta un proceso de duelo esperable como si es complicado, la terapia es un lugar de validación y apoyo psicológico. Además, tras haber sufrido una experiencia que aún constituye un tema tabú en la sociedad, la terapia es un espacio en el que se tiene en cuenta esta realidad social.

Aunque el duelo es una reacción natural, es un fenómeno idiosincrásico, por lo que se debe considerar teniendo en cuenta las características personales y contextuales de cada individuo. Enfoques terapéuticos como la Terapia Cognitivo Conductual o la Terapia de Aceptación y Compromiso podrían ayudar a transitar estos procesos.

Finalmente, me gustaría subrayar que el duelo perinatal por aborto espontáneo es una experiencia profundamente dolorosa que merece ser reconocida y validada tanto a nivel personal como social. A pesar de ser un tema tabú, es esencial que sepas que no estás sola en tu dolor y que tienes derecho a expresar tus emociones y recibir apoyo. La falta de reconocimiento y los prejuicios sociales pueden intensificar tu sufrimiento, por lo que es crucial fomentar un entorno de empatía y comprensión. No hace falta pasar por esto sola, haciendo como si no pasase nada, compártelo con alguien con quien tengas confianza. Y, si no sale bien, siempre habrá profesionales que puedan ofrecerte un espacio seguro para procesar tu pérdida. Al reconocer la validez de tu duelo, podemos empezar a romper el silencio y brindarte el apoyo necesario para atravesar esta difícil experiencia.

Sobre la autora

Laura Redondo Fidalgo es Psicóloga Sanitaria y Neuropsicóloga en Sinews. Aborda problemáticas que van desde la ansiedad, la depresión, el duelo y la autoestima, hasta los problemas en las relaciones interpersonales, entre otros. Su orientación es cognitivo-conductual, pero integra herramientas y técnicas de otras corrientes, como las Terapias de Tercera Generación, según las necesidades de cada paciente, gracias a su constante formación.

Laura Redondo
Departamento Psicológico, Psicoterapéutico y Coaching
Laura Redondo
Psicóloga
Niños, adolescentes y adultos
Idiomas de trabajo: Español e inglés
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